Maite Profe: Escultura del Barroco en Italia _ XVII-XVIII

Características generales 

• Busca la exaltación del poder, con marcada persuasión religiosa y propaganda política.
• Representaciones naturalistas con un canon esbelto, realizadas con gran virtualismo técnico y gran aparatosidad, sobre todo, en ropajes.
• Las composiciones son dinámicas, dando paso a una variedad de movimientos: curvas, ondas, espirales, disposiciones cóncavas, convexas, diagonales... 
• Se subraya el aspecto más drámatico del tema representado, rompiendo el equilibrio compositivo, llevando al límite la complejidad compositiva. Se busca representar un instante, el momento álgido, cumbre de un acontecimiento.
• Se plantea una escenografía muy estudiada en la que participan la incidencia de la luz, con violentos claroscuros, y las variadas perspectivas visuales.
• Se busca impactar en el espectador, conmoverle. Hacerle partícipe de toda una gama de sentimientos y emociones muy exaltados mediante gestos, rostros, telajes.
• El material por excelencia en Italia va a ser el mármol blanco, trabajado con exquisitez y valentía, muy pulido para las pieles, muy cincelado para otras materias, con excelente manejo del trepanado. La luz acaba la composición.
• La temática va a ser principalmente religiosa, para un gran público fervoroso, aunque los mecenas - Papas y privilegiados adinerados -  van a encargar obra mitológica para su disfrute personal.

Principales escultores italianos. Gian Lorenzo Bernini.

• Stefano MADERNO: De formación manierista, dota a sus obras de conmovedora expresividad. Su obra cumbre es Santa Cecilia (1600) en mármol. Gran efectismo con composición teatral. Situada en una catacumba. La luz recorre el cuerpo debido al suave moldeado. La joven presenta el cuerpo lánguido y la cabeza ladeada, que deja ver la marca de que ha sido degollada.
• Alessandro ALGARDI: Con mucho sentido escenográfico, trabajó casi siempre en Roma, rivalizando con Bernini por los encargos en el Vaticano. Entre sus obras más relevantes: la Tumba del Papa León XI (1634) y La decapitación de San Pablo.(1641)
• Nicola SALVI: Trabajó en la Roma del siglo XVIII, homenajeando la tradición berniniana y la del mundo romano clásico, como muestra en la monumental y popularísima Fontana de Trevi (1732).

• GIAN LORENZO BERNINI: (1598-1680) Es el máximo exponente del Barroco Italiano. Arquitecto y pintor, alcanzó la cumbre de su talento con la escultura, un arte que domina con gran virtuosismo, vitalidad y expresividad. Hijo de artista, desde bien joven despuntó como un portento inusual y se convirtió en el predilecto de los Papas de Roma, de los cardenales, de los nobles y de los reyes europeos, como Luis XIV, el rey Sol. Toda su obra es magnífica, deslumbrante, original y muy conocida. 

• Para el cardenal Scipione Borghese (busto 1632) uno de sus mecenas, realizó en su juventud varias obras mitológicas en mármol: Eneas y Anquises (1618), Rapto de Proserpina (1621) y la intensísima Apolo y Dafne (1622-25), con la ninfa metamorfoseándose en laurel huyendo de Apolo. 

• En esta época también realiza David (1623) que, en contraste con los realizados en el Renacimiento, materializa la intensidad del momento, con movimiento en espiral y líneas que contraponen piernas, brazos, cuerpo y cuello al giro de la cabeza. Se refleja la tensión de la acción, en los músculos y  rostro con mandíbula contraída, ceño fruncido…
• En su madurez, realiza obras religiosas muy escenográficas y conmovedoras destacando el Éxtasis de Santa Teresa (1647-52) en la Capilla Cornaro (Roma), donde une arquitectura, pintura y escultura en un magistral escenario con mármoles y jaspes de colores. 
• Los retratos de poder tendrán sus mejores ejemplos en los bustos del valido Cardenal Richelieu (1665) y del rey Sol Luis XIV (1665), en dinámico estudio del movimiento, con los rizos de la peluca y el ropaje orientados hacia la derecha mientras la cabeza y la mirada van a la izquierda.
• Entre sus piezas funerarias, muy solicitadas por el poder temporal en este tiempo, destaca el Monumento funerario para Alejandro VII (1673-74) con mármoles de colores y bronces, y llena de referencias religiosas y alegóricas , Vanitas incluida: la muerte asoma bajo la tela con un reloj de arena.
• Otras obras populares serían la Fuente de los cuatro Ríos (1648-51) en la Plaza Navona, rematada con un obelisco egipcio, dentro del programa de "Roma, Caput Mundi" o la Cátedra de San Pedro del Vaticano (1656), silla simbólica del Papa sostenida por los cuatro padres de la Iglesia.